En Marcha #1265
Órgano Central del Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador (PCMLE)
Del 8 a 14 de marzo, 2005

Karol Wojtyla, más conocido como Juan Pablo II, se desempeñó como Papa durante 26 años, tiempo en el cual fue pieza clave para el impulsó de la arremetida anticomunista a nivel mundial.

La designación de Wojtyla rompió la hegemonía que la mafia italiana mantenía en el Vaticano por 400 años. Detrás de su nominación se encontraba la derecha más recalcitrante de la Iglesia católica el, Opus Dei y la Central de Inteligencia Norteamericana CIA.

Juan Pablo II se convirtió en el instrumento utilizado por el imperialismo norteamericano para abrir las puertas de Europa del Este a los capitales internacionales, aprovechó la debilidad y podredumbre de los regímenes revisionistas del bloque soviético para fomentar el anticomunismo. Así en Polonia, a través de Lech Walesa, impulsó la creación del sindicato "Solidaridad" que jugó un papel trascendente para la caída del régimen revisionista, impulsando un discurso anticomunista. Con la caída del gobierno polaco, los medios de comunicación pro imperialistas vendieron la idea al mundo de que el Papa había derrotado al socialismo.

Wojtyla realizó varios viajes internacionales con el afán de inmiscuirse en la política interna de países con conflictos sociales y además de mejorar la deteriorada imagen de la iglesia. En 1985 el Papa llegó al Ecuador, durante su visita no se pronunció por las violaciones a los derechos humanos del régimen del entonces presidente León Febres Cordero, en general Juan Pablo II consintió y "bendijo" los gobiernos reaccionarios en todo el mundo.

El discurso del Papa, siempre estuvo cargado de contenido anticomunista, por ello la extrema derecha lo tildó de defensor de los derechos humanos y preocupado por los pobres, calificativos alejados de la realidad, un ejemplo constituye el trato dado al Arzobispo Oscar Arnulfo Romero (posteriormente asesinado), cuando en Roma se entrevistó con el entonces flamante Papa, quien ni siquiera se detuvo a mirar los informes, las fotografías y las copias de las cartas enviadas por el arzobispo de San Salvador, en su desesperado pedido de auxilio para hacer algo ante la matanza del pueblo salvadoreño (70 mil personas muertas a manos del ejército, la Guardia Nacional y los escuadrones de la muerte), en aquella ocasión el Papa recordó a Romero, que su papel como arzobispo era mantener "buenas relaciones" con el gobierno y no preocuparse por lo que pase con el pueblo.

En sus intervenciones Juan Pablo II fomentó concepciones atrasadas, reaccionarias, entre ellas el machismo, se opuso a la utilización del condón y la aplicación del divorcio, entre otras.

La muerte del Papa ha puesto nuevamente en pugna a los grupos que tienen el interés de controlar el Vaticano. El Opus Dei es uno de ellos, al que se le responsabilizó por la muerte del antecesor de Wojtyla, el Papa Juan Pablo I que duró muy poco tiempo al frente de la Iglesia Católica, recordando que, cuando en su interior grandes intereses económicos y políticos están en juego, el asesinato es un recurso aplicable.

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